La pandemia por Coronavirus SARS -CoV- 2, declarada el 11 de marzo de 2020, ha impactado el aspecto sanitario, social, económico, cultural y psicológico de los países, haciéndose notables loscambios en el modelo tradicional de atención sanitaria, sin discriminar lo relacionado a lasalud materno infantil.
Cambios por Covid-19
En las estructuras sanitarias exitosas, se trabaja por laprotección del binomio madre-hijo, priorizando la protección del niño sano, promoviendo la atención oportuna de la madre y evitando enfermedades en la primera infancia.
Una de las medidas con mayor evidencia en la práctica médica es la promoción de la lactancia materna, que ha demostrado tener notables beneficios sobre la salud materno-infantil, y que tiene mayores resultados cuando se acompaña de actividades como el contacto piel con piel después del nacimiento, lactancia materna temprana (independiente de la vía de nacimiento) y el alojamiento conjunto inmediato.
Los cambios de los protocolos debido a la pandemia se debieron en gran medida al desconocimiento inicial del comportamiento de la enfermedad en los infantes y embarazadas por tratarse de una patología nueva, pero también se vio reforzada por la persistencia en el uso de medidas no sustentadas en medicina basada en evidencias (MBE).
¿Qué dicen los estudios?
Hasta la fecha, en los estudios que se han realizado en tejido placentario, muestras de líquido amniótico, leche materna, sangre de cordón umbilical y aspiración de secreciones nasales de los bebés de mujeres con COVID – 19, no se ha aislado el virus. Aún más alentador, hay estudios que indican la presencia de anticuerpos contra el SARS – CoV – 2 en la leche materna de mujeres infectadas (es decir, el bebé recibiría anticuerpos a través de la leche). Resultados que sustentan mantener la lactancia materna aún cuando la madre tenga diagnóstico de COVID – 19.
La transmisión madre-hijo (transmisión vertical) de la enfermedad tampoco ha sido demostrada, y el riesgo de transmisión por contacto directo madre infectada-recién nacido (transmisión horizontal), es la misma que la población general cuando está en contacto estrecho con alguna persona enferma.
Conclusión
Todas estas conclusiones basadas en estudios y análisis sistemáticos durante los últimos 14 meses reafirman la necesidad de promover la lactancia materna como efecto protector del binomio madre-hijo y evitando que sean separados luego del nacimiento. Medida que indudablemente debe ser individualizada y dependerá del entorno sanitario y condición clínica de la madre.
La leche materna es el mejor alimento para cada bebé, además del más nutritivo. Mejora los índices de morbilidad; contiene anticuerpos especiales que protegen a los niños contra infecciones respiratorias, asma, enfermedades diarreas, entre otras; disminuye la mortalidad infantil y los índices de desnutrición de los países, principalmente aquellos con nivel socioeconómico bajo.
Los beneficios de la lactanciano se aprecian solo en el infante, sino también en lamadre: reduciendo el riesgo de depresión post-parto; reduciendo el riesgo de cáncer de mama, de ovario y el riesgo de osteoporosis luego de la menopausia.
La salud, como definición, es unestado completo de bienestar físico, mental y social. En la madre y su hijo, la lactancia materna constituye un mecanismo efectivo, integral y completo para preservarla.
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