Todo sobre el apego
El apego es el fuerte lazo que se forma entre papás y sus bebés. Algunas personas sienten este amor incondicional al instante, sin embargo, otros requieren de un par de días, semanas o meses para sentir el vínculo. La vinculación es diferente para todos.
Tu relación con el bebé es la primera que ellos experimentan, y un apego fuerte y seguro ayuda a que esa relación sea positiva. Demostrar amor y afecto hacia tu bebé y protegerlos del peligro les ayudará a desarrollar un sentimiento de seguridad e incluso aumentará su autoestima.
La experiencia de paternidad de cada persona es diferente, pero aquí hay algunos consejos de otros padres que podrían ayudarte.
Tips para mamá
Muchos mimos y cariño
"Yo no sentí una conexión instantánea que otras personas al parecer sienten", dice María. "El parto fue sin mayores problemas, pero largo y agotador, por lo que cuando tuve en mis brazos a José por primera vez, en vez de pensar 'awww', pensé 'Dios mío, ¡me muero por una taza de té!'.
Dentro de los próximos días y semanas, luego de que el dolor desapareciera y con muchos (muchos) mimos, algo surgió en mí, y ahora estoy profundamente embobada por mi hijo".
Lenguaje corporal del bebé
"Después de todo lo que había leído acerca del minuto de apego en el parto, estaba esperando sentir 'fuegos artificiales' cuando nació Angela", dice Margot. "Sin embargo, sentí aprensión: ¿podré con el desafío de cuidar a este indefenso y delicado humano? No sabía qué hacer ni cómo calmarla, por lo que hice lo que me sugirió una amiga: hablar, leer o cantarle.
Esto hizo que sintiera cierta cercanía con Angela y podía notar a través de su lenguaje corporal que le gustaba y lo disfrutaba. Han pasado seis años, y aún no siento 'fuegos artificiales' como tales, pero disfruto muchísimo el tiempo juntas".
Contacto piel con piel
"En el plan de parto especifiqué que, si todo salía bien, me entregaran a mi bebé inmediatamente después de que naciera. Había leído que este contacto piel con piel luego del parto ayudaba muchísimo con el apego y definitivamente funcionó para mí", cuenta Elisa.
"Desde el momento en que la pusieron en mis brazos, el amor puro que sentí fue abrumador y ese sentimiento aumenta cada día".
Contacto visual
Había leído sobre el contacto visual y cómo ayuda con el apego y vinculación madre-hijo cuando estaba embarazada, por lo que cuando Sofía nació quise intentarlo", dice Katherine.
"No planeé nada especial, solo me preocupé de mirarla a los ojos al sostenerla o al mudarla. Cuando sus ojos encajaron con los míos por primera vez, mi corazón saltó, y continúa saltando cada vez que sucede. Ella es mi mundo entero".
No te estreses ni fuerces el apego
"Realicé todo lo que sugerían los libros sobre maternidad, pero no se sintió natural para mí, y hasta este día (mis hijos tienen 6 y 8 años de edad), aún no lo siento", cuenta Gaby.
"Mi consejo es no forzar el vínculo madre-hijo. Creo que el apego emocional viene en diferentes formas y mientras el mío no es como el de una película perfecta, somos una familia muy feliz".
Consejos para papá
¿Prefieren a mamá? No lo tomes como algo personal
A los bebés les gusta la rutina, así que si están acostumbrados a que mamá es quien suele hacer alguna actividad, como por ejemplo hacerlos dormir, puede desestabilizarlos si mamá se ha ido y papá está allí.
"La primera vez que intenté bañar y acostar a Tomás fue horrible", dice Pedro. "Gritó más de lo que había escuchado antes y estaba convencido de que simplemente no se sentía cómodo conmigo, lo cual no es un buen sentimiento. Sin embargo, conforme Tomás ha ido creciendo, he podido ver que realmente sólo se trata de que es una criatura de hábito".
Continúa Pedro: "Por eso, ahora mi esposa y yo lo hemos acostumbrado a que en la hora de acostarse estamos los dos. De esta forma, si alguna vez necesito hacerlo yo sólo, Tomás está absolutamente bien", concluye.
No compitan entre ustedes
"Mi consejo principal es que aprendas de tu pareja en lugar de competir con ella" dice Santiago, padre de Eva de 2 años. "Solía molestarme porque yo luchaba con cosas como vestir a mi hija y salir de la casa en menos de una hora y, en retrospectiva, fui un poco terco al no pedirle consejo a mi esposa sobre cómo hacia ella las cosas."
No te olvides: el cuidador que está más en casa, practica más y aprende más sobre la mejor manera de cuidar a tu hijo, así que no te preocupes ni sientas que no eres igual de bueno porque hay cosas que no te salen tan natural como a tu pareja. Un consejo para las madres o cuidadores primarios: asegúrate de que tu pareja pueda intentar hacer las cosas por sí mismo y se solidaria, no crítica.
Crea tu propio tiempo de papá y bebé
El tiempo en familia es excelente, pero si no eres el cuidador principal crear momentos solo para ti y tu bebé puede ser muy útil. "Me pierdo muchas horas de acostarse, pero las mañanas de fin de semana son nuestro tiempo", dice Javier, papá de Ignacio de 4 años. "Me levanto temprano con él mientras mi esposa descansa y hacemos panqueques, jugamos y vamos a nadar. Realmente creo que nuestro vínculo no sería tan fuerte si no fuera por esos momentos", cuenta Javier.
Si alguna vez te preocupa tu capacidad de vinculación con tu bebé, comunícate con tu médico.